Te ofrecemos una amplia varidad de productos para comprar tanto renta fija pública como privada, además de fondos de inversión
Acceso a bonos de deuda pública y privada
Acceso a mercado primario y secundario en España
Contratación intuitiva y sencilla
Renta fija
La renta fija ha sido, históricamente, uno de los principales refugios de los inversores conservadores. En la actualidad, los ahorradores están de enhorabuena, ya que con la subida de tipos la renta fija se encuentra en uno de los momentos de mayor atractivo.
Existe una multitud de productos de renta fija que pueden cumplir con las necesidades de los ahorradores, desde letras y bonos estatales como las letras del Tesoro, hasta bonos corporativos que pueden ofrecer rentabilidades muy interesantes. Y todo esto está a tu disposición en Renta 4 Banco.
Este tipo de activo de renta fija ofrece a los inversores un tipo de interés fijo que se abona mediante cupones periódicos.
Estos cupones representan los intereses, se cobran normalmente una vez al año, tienen un valor fijo y su cuantía y fecha de cobro es conocida incluso antes de su emisión.
Cuando hablamos de emisiones de bonos, los plazos son de 3 y 5 años, mientras que las obligaciones tienen con plazos de 10, 15, 30 y 50 años. Estas opciones brindan a los inversores la oportunidad de diversificar su cartera y elegir plazos que se adapten a sus objetivos financieros.
Si estás pensando en invertir en renta fija, es posible que tengas esta duda. ¿Cual es más conveniente? Pues la respuesta solo depende de ti.
Con esta información, ya podrás tener más claro si los bonos se ajustan mejor a ti como inversor o, por el contrario, si las letras cumplen mejor en tu estrategia.
La inversión en bonos, al ser renta fija, está dirigida principalmente a inversores conservadores. Sus principales características son:
En Renta 4 Banco ofrecemos a nuestros clientes un amplio universo de inversión en renta fija, desde letras a bonos u obligaciones, con acceso tanto a los mercados de deuda pública como de deuda privada.
Podrás invertir en las subastas de bonos nacionales, así como acudir mercado secundario, y todo ello con un proceso de compra fácil e intuitivo.
Cuando el emisor de los productos de renta fija es la administración pública de un país, hablamos de bonos y obligaciones del Estado.
En el caso de España, el encargado de hacer estas emisiones es el Tesoro Público.
Cuando el emisor de la deuda es una entidad privada, hablaríamos de bonos y obligaciones corporativos.
A nivel de comportamiento, los bonos y obligaciones del Estado y los corporativos son exactamente iguales.
Santander
Audasa
Elecnor
Eroski
Acceso directo a los mercados
Opera con Renta 4 Banco tanto si quieres comprar en el mercado primario (subastas) como negociar en el secundario.
Proceso sencillo
Nuestras herramientas especializadas facilitan el acceso directo a las emisiones mensuales y a la compra-venta de valores de renta fija.
Comisiones mínimas
Adquiere bonos y obligaciones del Estado con una comisión del 0,20% para el mercado secundario y del 0,30% para la suscripción de bonos en el mercado primario.
Somos especialistas
Te acompañamos en el proceso de inversión. Contarás con la ayuda de un especialista en el momento que lo necesites.
Información continua
Accede a todos los resultados de las subastas y a las cotizaciones en el mercado secundario en tiempo real.
Tanto el cupón cobrado como el rendimiento obtenido se declaran después de obtenerlo o de vender los títulos, tanto si se ha llegado a término del plazo como si la venta se ha producido en otro momento anterior. Y siempre en la declaración de la renta que realizamos en el ejercicio posterior.
¿En qué casilla? En la 31, dedicada a los ‘Rendimientos procedentes de la transmisión, amortización o reembolso de otros activos financieros’. En ese apartado se incluye la amortización de los bonos y de las obligaciones del Estado, todos títulos de deuda pública, pero con diferentes plazos a partir de los dos años.
Mientras que los rendimientos de las letras del Tesoro no están sujetos a retención en el IRPF, los intereses (cupón) de los bonos y las obligaciones sí lo están. En concreto, la retención es del 19%. La amortización o venta de estos activos de deuda pública a medio o largo plazo, sin embargo, no están sometidas a retención.
Conocer estas retenciones es importante para determinar el resultado de la liquidación del IRPF, ya que estas hay que deducirlas. Así, si las retenciones son superiores a la cuota resultante a pagar, el inversor recibirá como resultado de la liquidación del IRPF el exceso retenido.
Si estás pensando en invertir en bonos o en acciones, lo primero que tienes que tener en cuanto es tu perfil de inversor. Los bonos son un producto a largo plazo que ofrece seguridad y al mismo tiempo una rentabilidad fijada que suele ser ajustada. Por su parte, las acciones ofrecen mayor potencial de revalorización, pero también pueden ofrecer rentabilidades negativas.
Por tanto, dependiendo de tu aversión al riesgo o no, un producto puede ser más adecuado que el otro. También existe la posibilidad de que destines una parte de tu cartera a renta fija y la otra parte a renta variable. Así podrás diversificar tu cartera en una inversión más segura y otra con mayor potencial de revalorización.
Actualmente la rentabilidad de los bonos y obligaciones del Estado llega casi al 4% en determinados plazos. Se trata de un rendimiento que sigue siendo menor que la inflación pero que puede resultar atractivo para los inversores conservadores que buscan retornos con bajo riesgo.
A pesar de considerarse inversiones relativamente seguras, invertir en bonos del Estado implica una serie de riesgos de los que debemos estar pendientes, como los cambios de la tasa de interés, la inflación, el crédito, la liquidez y las fluctuaciones del mercado. Por eso, diversificar, tener claros nuestros objetivos y nuestro perfil de tolerancia al riesgo son muy importantes al invertir en bonos estatales, y es aconsejable buscar asesoramiento financiero si tenemos dudas.