Trading: qué es y cómo funciona

El trading es una de las técnicas de inversión más arriesgadas. Para llevarla a cabo es necesario contar con una gran formación y un profundo conocimiento de los mercados. Pero ni siquiera los especialistas más experimentados son capaces de garantizar su práctica sin riesgos.

Eso sí, como suele ocurrir en el mundo de las inversiones, grandes riesgos también pueden conllevar beneficios ¿Quieres saber más sobre esta popular técnica de inversión? No te pierdas este artículo en el que vamos a contarte todo lo que necesitas saber sobre el trading.

Qué es el trading 

Si hablamos de trading, seguramente lo primero que venga a tu mente son personas trajeadas pendientes de grandes pantallas con muchos números de colores y pegadas continuamente al teléfono. Efectivamente, hace unos años este concepto no estaba muy lejos de lo que nos contaban las películas, pero actualmente, no tiene nada que ver con ese tipo de escenas.

De hecho, cualquier persona con conexión a internet y un ordenador puede practicar trading desde su hogar. Pero, ¿qué es exactamente el trading?

Comencemos por simplificar al máximo el concepto con el fin de hacerlo comprensible a todos los públicos. Podríamos decir que el trading consiste en intercambiar productos por dinero. Estos productos presentan un valor en función de la oferta y la demanda del mercado bursátil y para ser más concretos, son activos cotizados. Por tanto, el trading es la compraventa de activos financieros.

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¿Cómo funciona el trading?

Anteriormente comentábamos que en la actualidad, cualquier persona puede practicar trading desde casa. De hecho, podríamos comparar el trading con el funcionamiento de algunos videojuegos, pero en este caso, con dinero real y los riesgos que esto conlleva. 

Por eso, insistimos desde el inicio del artículo en la importancia de contar con una extensa formación dentro del sector y un profundo conocimiento de los mercados bursátiles para tratar de minimizar dichos riesgos. 

Dentro de la compraventa de activos en el mercado, lo que intentará el trader es localizar aquellos activos con precios al alza, con el fin de comprar barato y posteriormente, vender mucho más caro. Del mismo modo, cuando el precio del activo se mueve a la baja, lo más recomendable siempre es venderlo para posteriormente, volverlo a comprar cuando sea más barato, volviendo a esperar un crecimiento en su valor. 

Sobre el papel parece sencillo, ¿verdad? Pues nada más lejos de la realidad. El trading requiere un nivel de estudio y atención muy elevados. Normalmente, se realiza en diferentes mercados, con operaciones que se suelen cerrar en el mismo día y con activos muy líquidos con precios muy volátiles en los que las tendencias cambian en cuestión de segundos. Y esos cambios pueden llegar a conllevar pérdidas económicas muy importantes.

Como ves, pese a ser una práctica que cualquiera puede realizar desde su ordenador, esto no quiere decir que todo el mundo sea capaz de llevarla a cabo con éxito. Y es que, seguramente hablemos de una de las técnicas de inversión más complejas y arriesgadas que existen.

Cómo empezar con el trading

Los tres primeros pasos para iniciarse en el trading son: formación, formación y formación. Si quieres convertirte en un trader con éxito, no te bastará con dedicar unas horas a visualizar varios vídeos por internet. Te recomendamos que inviertas meses en formarte, observar la evolución de los mercados, consultar con expertos etc.

Una vez dispongas de la formación y los conocimientos adecuados y cuentes con un remanente que te permita invertir con tranquilidad, te aconsejamos que dediques tiempo a practicar en uno de los simuladores de trading que puedes encontrar por internet. Allí te darás cuenta de lo rápido que pueden generarse cuantiosas pérdidas en este tipo de inversión y al mismo tiempo, seamos positivos también, grandes beneficios.

Recuerda que en muchas ocasiones resulta imposible predecir los movimientos del mercado, pero contar con un background de conocimientos importante y realizar un análisis exhaustivo de los distintos condicionantes, puede ayudarte a acertar en tus movimientos.

Las operaciones no meditadas, movidas por impulsos o intuiciones sin fundamentos no valen dentro de este mundillo. Además, te recomendamos que te familiarices con conceptos como el stop loss o el taken profit, órdenes automáticas que los brokers ponen a disposición de sus clientes con el fin de asegurar beneficios en una determinada operación o evitar pérdidas desmesuradas.

Ventajas del trading

Además del riesgo que conlleva, el trading también presenta ventajas muy importantes cuando se lleva a cabo de la forma adecuada. A continuación, mencionamos las más relevantes:

• Libertad y flexibilidad laboral: El trader se marca sus propios horarios de trabajo y puede llevar a cabo su labor desde cualquier lugar del planeta. Esto le permite aprovechar esos momentos en los que se encuentra más inspirado o cuenta con más energías para sumergirse dentro de los mercados financieros. Él mismo marca sus propias reglas a nivel profesional.

• Diversificación: Los traders trabajan con diferentes tipos de instrumentos financieros. A mayor diversidad, generalmente menos riesgo y más posibilidades de éxito a largo plazo. Eso sí, para mantener una diversificación de activos acertada es fundamental conocer muy bien los mercados.

• Independencia a nivel profesional: Los traders son completamente autónomos en sus decisiones. No responden a las órdenes o directrices de un superior. Ellos deciden cuándo arrancar su cartera, cómo diversificar o si desean cambiar el enfoque de sus inversiones. 

• Acceso a una comunidad: Existen comunidades de traders en las que diferentes profesionales comparten sus experiencias e intercambian ideas para ayudarse los unos a los otros. Aunque parezca una profesión muy competitiva, no es así. Y es que, el nivel de estrés que suele ocasionar, es algo que también une.

• Grandes beneficios potenciales: La última ventaja, pero seguramente la más importante y el motivo por el que cada vez más profesionales deciden iniciarse en este mundillo. El trading no garantiza riqueza a corto plazo, pero sí la oportunidad de conseguir grandes beneficios. 

Como conclusión podríamos decir que el trading no es algo apto para todas las personas. La vía hacia el éxito dentro del sector pasa por muchas horas de formación, observación de los mercados, práctica, mucha práctica y adquisición de habilidades con el fin de llegar a esa ansiada meta de los beneficios.