Los últimos días hemos podido ver largas colas de gente esperando a las puertas del Banco de España. Se trata de ahorradores que quieren invertir su dinero en Letras del Tesoro, un tipo de instrumento financiero emitido por el Gobierno de España.
En un contexto después de un largo periodo de tipos cero y sin rentabilidad, los ahorradores buscan vías de rentabilizar su dinero corriendo el menor riesgo posible. Por eso, las Letras del Tesoro son una buena opción, ya que el pagador es el propio Estado, algo que da una serie de garantías de recuperación de la inversión.
No obstante, antes de dejarse llevar por la tendencia, es recomendable reconocer todos los riesgos y beneficios. Solo así podremos buscar la opción que mejor se adecúe a nuestras necesidades.
¿Qué son las Letras del Tesoro?
Las Letras del Tesoro son un instrumento de deuda pública a través del cual el Estado busca satisfacer sus necesidades de financiación a corto plazo, es decir, a un máximo de 12 meses. Exactamente pueden ser a 3, 6 o 12 meses. Esta búsqueda de financiación se hace a través del Tesoro Público.
Tal y como explica la web del Tesoro Público, las Letras del Tesoro se empezaron a emitir en el año 1987.
El boom de las Letras del Tesoro
No obstante, lo que no todo el mundo tiene claro es por qué hay tanta gente interesada en comprar Letras del Tesoro exactamente en este momento.
Esto ya sucedió a finales de los años 80. En aquel momento, los particulares difícilmente podían acceder a comprar Letras del Tesoro a través de su entidad financiera. El Tesoro Público tenía verdadero interés en diversificar el tipo de compradores de los bonos y letras que emitía.
Jesús Sánchez-Quiñones – Director General de Renta 4 Banco
Tal y como explica en su blog de Expansión Jesús Sánchez-Quiñones, Director General de Renta 4 Banco, no es la primera vez que se despierta este furor por adquirir Letras del Tesoro. Muy al contrario, ya ocurrió lo mismo en los años 80, cuando “El Tesoro Público tenía verdadero interés en diversificar el tipo de compradores de los bonos y letras que emitía”.
Eso desembocó en que muchos españoles quisieran hacerse con este instrumento financiero, tal y como está ocurriendo ahora. Y es que las Letras del Tesoro tienen un riesgo bajo al estar respaldadas por el Estado español, por lo que aseguran la rentabilidad. Es un gran atractivo en cualquier momento, pero mucho más cuando sube la inflación, ya que es una forma de mitigar sus efectos.
Actualmente, la rentabilidad marginal de las letras a seis y doce meses se aproxima al 3%, por lo que han despertado el interés de inversores minoristas.
En resumen, las Letras del Tesoro son una forma segura y accesible para los inversores de invertir en la deuda del Gobierno. Aportan financiación al Estado y, a cambio, reciben una tasa de interés y el reembolso del capital a corto plazo.
Riesgos y beneficios de las Letras del Tesoro
Como decíamos, hay una serie de beneficios asociados a las Letras del Tesoro que hacen de ellas una muy buena opción.
Sin ninguna duda, una de las más llamativas es la seguridad. Si invertimos en estos valores a renta fija recuperaremos, pasado el tiempo estipulado, el dinero que habíamos dedicado a esta inversión. A eso tendremos que sumarle la rentabilidad generada, que conoceremos en el momento de la adquisición. Eso sí, una vez vencido el plazo de la Letra.
Eso no significa que no se puedan vender antes de que finalice el plazo, sino que, en ese caso, dependeremos del mercado. Además, adelantar esa transacción tendrá un coste por venta.
Otra gran ventaja de invertir en Letras del Tesoro es que la rentabilidad la obtendremos a corto plazo. Como decíamos anteriormente, estos instrumentos de deuda pública ofrecen posibilidades de inversión desde los 3 hasta los 12 meses. Por eso, son muy buena opción para aquellos inversores que quieran tener invertido su dinero durante poco tiempo.
No obstante, también hay que tener en cuenta los riesgos que asumimos al adquirir Letras del Tesoro cuando los tipos de interés suben, sobre todo teniendo en cuenta la inflación. De todos modos, no hay que preocuparse por eso, ya que eso nos afectará solo si queremos vender antes de que finalice el plazo de vencimiento.
Otro hándicap es la existencia de una inversión mínima. Si bien no es muy elevada, sí está estipulado que la cantidad mínima a invertir son mil euros (valor nominal). Si queremos que la cantidad sea mayor, siempre tendrá que ser múltiplo de mil.
La tributación de las Letras del Tesoro
Imaginemos que hemos decidido invertir en Letras del Tesoro y, pasado el tiempo estipulado, recuperamos nuestra inversión, además de la rentabilidad. Llegados a ese punto, ¿hay algo que debamos hacer?
Pues, como con todos los ingresos, tenemos que incluirlo en la Declaración de la Renta. Exactamente en la casilla 30 del modelo 100. Así, la diferencia entre el importe obtenido en la venta o amortización de la Letra y el pagado en su compra tiene la consideración de rendimiento de capital mobiliario. Habrá, por tanto, que incluirlo en la declaración del ejercicio correspondiente.
Existen tres tramos de base liquidable para su tributación:
- Hasta 6.000 euros un 19%.
- De 6.000 euros a 50.000 euros al 21%.
- Cantidades superiores a 50.000 euros al 23%.
Si quieres ampliar la información sobre las Letras del Tesoro o ya estás decidido a invertir, pero no quieres esperar cola en el Banco de España, ponte en contacto con un asesor de Renta 4 Banco.
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Habla con un experto
En Renta 4 Banco sabemos lo importante que es la información en momentos de tanta volatilidad. Siendo fieles a una filosofía slow finance es importante actuar reflexivamente pero con decisión para controlar el riesgo según tus objetivos a medio plazo. Habla con tu asesor para que te ayude a determinar la forma más apropiada de actuar.
Te recordamos que en Renta 4 Banco estamos a tu disposición para evaluar tus inversiones y controlar los riesgos, y especialmente en los momentos de incertidumbre.
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