Nos preguntábamos la semana pasada si se había despertado el apetito por el riesgo y, en particular, el apetito por las tecnológicas. La respuesta nos la da la subida semanal del 3,3% del Nasdaq, que es ya la quinta consecutiva. El Nasdaq acumula, en lo que va de año, una subida del 14,7%, casi doblando al S&P y más que quintuplicando al Dow Jones.
También han subido con fuerza esta última semana nuestros dos valores del pasado lunes, Microstrategy y Tesla, que han avanzado, respectivamente, un 10,2% y un 6,8%.
Pero la verdadera estrella tecnológica de la semana ha sido Meta Platforms, antes llamada Facebook, que ha vuelto con aires de "revival" tras publicar el miércoles sus resultados al cierre del mercado (after hours). Meta superó las estimaciones tanto en ventas como en beneficio, y anunció una recompra de acciones propias (buy back) nada más y nada menos que de 40 mil millones de dólares, lo que en una compañía que capitaliza algo menos de quinientos mil millones de dólares no está nada mal.
No es de extrañar que sus acciones subiesen un 20% el jueves y un 22,9% en el conjunto de la semana, acumulando ya una ganancia del 55% desde el uno de enero de este año y del 105% en los últimos tres meses.
Es curioso que hoy estemos haciendo un Gráfico semanal que es justo el contrario al que publicábamos el pasado 1 de agosto de 2022, cuando la cotización de Meta caía tras presentar sus cifras del segundo trimestre, mientras que la de Amazon subía con fuerza.
Decíamos entonces, literalmente, que tras perder un 52% en lo que iba de año, Meta Platforms cotizaba a un PER inferior a 15 veces beneficios y sus fundamentales eran atractivos para quien confiase en el talento empresarial de Mark Zuckerberg, ofreciendo una buena oportunidad de compra para inversores tolerantes.
La realidad es que las acciones de Meta siguieron cayendo tras la publicación de ese Gráfico semanal, pero a partir de entonces Meta ha hecho sus deberes, a veces dolorosos, como la reestructuración de plantilla que anunció en noviembre, y se ha anotado un cargo de 4.610 millones de dólares en el ejercicio, relacionado con esos “esfuerzos de reestructuración”, que empiezan a dar sus frutos.
Tal vez por ello, y porque había caído mucho (Meta llegó a perder dos tercios de su valor desde los máximos de 2021), nuestro Gráfico de hoy es justamente el contrario del que publicábamos en agosto pasado, ya que ahora Meta ha subido un 20% y, por contra, Amazon ha bajado un 8,5% tras publicar ambos sus cifras del cuarto trimestre.
La lección, en todo caso, es que las compañías tecnológicas bien gestionadas e innovadoras van a salir muy reforzadas de esta crisis, y van a crear mucho valor en el futuro para quienes sepan apostar por ellas en los momentos difíciles.
A nuestro juicio, tanto Meta como Amazon se incluyen entre las compañías por las que se puede apostar con la vista puesta en el medio plazo, y por ello aprovecharíamos los momentos de debilidad que, en nuestra opinión, vendrán en algunos momentos del año, para comprar acciones de ambas empresas.
Pero recordando siempre que solo deben invertir en este tipo de empresas los inversores que sean muy tolerantes al riesgo.
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